Suzuki Celerio, Opiniones

El Suzuki Celerio es la apuesta más urbana de la marca japonesa. Sus reducidas dimensiones y su agilidad hacen de él un automóvil ideal para desenvolverse con soltura por los abarrotados núcleos urbanos.

Sin embargo, este coche no es solo una herramienta para sobrevivir a las grandes aglomeraciones, si no que puede ser el compañero de viaje perfecto gracias a sus cualidades en carretera. Además, cuenta con otro punto a favor.

Y es que mantiene una excelente relación calidad-precio, algo a tener en cuenta para muchos conductores. Su comportamiento es bastante mejor al que cabría esperar de un vehículo de muy bajo costo con relación a los de su competencia.

Es cierto que no ofrece un confort desproporcionado y que los lujos en el interior son prácticamente nulos, pero este coche es capaz de afrontar carreteras de muy diversa índole sin apenas pasar apuros. Durante los recorridos largos se mantiene fiable y aísla bien a sus ocupantes, algo que no siempre se puede ver en un automóvil de estas características.

A continuación te nombraremos las características por el cual este vehículo es uno de los más eficientes y rendidores y con un costo muy accesible quédate con nosotros que te nombraremos sus cualidades.

Cualidades que caracterizan al Suzuki Celerio

Diseño urbanita Se trata de un vehículo eminentemente citadino: pequeño, ágil y eficiente pero adaptado a la ciudad.

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Rendimiento de Suzuki Celerio con portón trasero

El único motor es un motor de gasolina de 1.0 litros y tres cilindros con 67 CV. Eso puede sonar un poco escaso, pero es suficiente para un coche tan pequeño y ligero como el Celerio. Sin embargo, como era de esperar, se siente más cómodo que en la ciudad. Los modelos equipados con una caja de cambios automática AGS aceleran de forma más lenta y es mejor evitarlos.

El Celerio tiene una suspensión relativamente firme según los estándares de los coches de ciudad, por lo que los baches urbanos son más notables que en un Hyundai i10 o Skoda Citigo. Sin embargo, los eficaces amortiguadores proporcionan una conducción razonablemente cómoda. De hecho, el Celerio se porta bien a altas velocidades, aunque un Kia Picanto lo hace todavía mejor.

La gama de motores que monta el Celerio es bastante reducida, pues tan solo cuenta con un único propulsor. Se trata de un bloque de gasolina de un litro de cilindrada que desarrolla 68 caballos de potencia. Puede que no parezca mucho, pero no se podría haber elegido un motor mejor para este modelo.

Sus consumos son de lo más reducido y su comportamiento está muy lejos de ser tosco y sin nervio. Este motor incorpora de serie una caja de cambio manual de cinco velocidades, preciso pero con las relaciones algo largas.

Sin embargo, de manera opcional se puede elegir un sistema de transmisión automática 'Automatic Gear Shift', que incluirá embrague ruborizado. La estructura del chasis y la suspensión no son grandes trabajos de ingeniería automovilística, pero mantienen al Celerio pegado a la carretera si no se le aprieta demasiado.

Conducción del Suzuki Celerio

Aunque el Celerio no es tan “guay” de conducir como un Picanto o un Volkswagen Up, la suspensión firme evita que el cuerpo se balancee demasiado a través de giros y curvas cerradas, e incluso tiene un buen agarre.

Sólo falla en la dirección. No ofrece mucha retroalimentación a velocidades más rápidas, aunque es lo suficientemente pesada como para que el coche se sienta relativamente estable cuando vas en línea recta por la autopista.

Distribución interior

Como con casi todos los coches de ciudad, el volante del Celerio se ajusta sólo en altura, no en alcance. Esto significa que puede que tengas dificultades para encontrar la posición de conducción ideal, aunque incluso el asiento del conductor más barato viene con un asiento de altura ajustable, lo que es raro en la clase de coche de ciudad.

El asiento es fácil de ajustar, pero podría necesitar un poco más de apoyo lateral y lumbar. Por otra parte, las mismas críticas se pueden hacer a muchos coches de este segmento de precios.  El salpicadero es relativamente fácil de entender, gracias a los sencillos controles giratorios del calentador (o al sistema de aire acondicionado en los niveles de acabado más altos).

En el volante nos encontramos con los controles de manipulación del radio, que por su ubicación y la correcta sujeción del volante pueden ser manipulados con el pulgar izquierdo sin mayor problema.

En el extremo inferior izquierdo del centro del volante nos encontramos con unos discretos botones para el control de la configuración y control de llamadas mediante enlace Bluetooth, del que hay que decir es muy sencillo de configurar y no requiere la necesidad de gritar dentro del vehículo para que al otro lado de la llamada puedan escuchar la voz.

Tras el timón, los controles de luces y parabrisas al lado izquierdo y derecho respectivamente, y tras este conjunto, los relojes para las revoluciones y velocidad y la pantalla del computador de a bordo, donde se muestran las marchas, kilometraje, un rango aproximado del kilometraje restante que se puede recorrer con la tanqueada y ofrece doble memoria del odómetro para el kilometraje recorrido y el promedio de consumo.

El conjunto se complementa en la parte inferior con un espacio para guardar objetos como la billetera y un espacio doble para bebidas entre la palanca de cambios y el freno de mano, situado de tal forma que no se compromete la manipulación de estos dos elementos.

En la parte superior nos encontramos con el espejo retrovisor, que ofrece un completo despliegue de visión de paral a paral trasero y la luz del habitáculo que acompaña al micrófono del sistema de llamadas Bluetooth.

En la parte trasera, como lo habíamos comentado, un espacio amplio para sus ocupantes y apoyacabezas para los ocupantes de los dos extremos. Tras la silla, un baúl que cumple con las exigencias de maletero para cuatro maletas de tamaño mediano, o si se prefiere, la segunda línea de asientos es totalmente abatible, ofreciendo un total de capacidad de hasta 235 litros.

Practicidad, El objetivo era crear un coche sencillo y sincero, que se olvida de la calidad para apostar por la economía y a un modelo practico en todo momento.

Visibilidad del Celerio Suzuki

Los pilares relativamente delgados del parabrisas le ofrecen una buena visibilidad desde la parte delantera, y las ventanas laterales son lo suficientemente altas y anchas como para no obstruir la visión al salir de los cruces.

La línea de la ventana se eleva ligeramente hacia la parte trasera del coche y los montantes traseros son bastante gruesos, aunque la visibilidad por encima del hombro sigue siendo bastante buena. Es una pena que los sensores de aparcamiento trasero no estén instalados en ninguna versión. Tampoco están disponibles como accesorios opcionales de fábrica; la única manera de tenerlos es como un accesorio para el distribuidor.

Suzuki  Celerio con tecnología infoentretenimiento

Si esperas una pantalla táctil en color de alta tecnología, te sentirás decepcionado. El sistema de información y entretenimiento de Celerio tiene una pequeña pantalla, pero es monocroma y difícil de leer, lo que hace que sea relativamente difícil sintonizar la radio o encontrar a la persona que quieres marcar en tus contactos.

Si te decides por una SZ2 de nivel básico, obtendrás una radio DAB y un reproductor de CD. Una actualización a SZ3 trim trae Bluetooth para que usted pueda legalmente hacer y recibir llamadas telefónicas en movimiento, y un enchufe USB para cargar su teléfono y reproducir la música almacenada en él a través del sistema de sonido de dos altavoces más bien diminuto.

Espacio y practicidad

Para un coche tan pequeño, el Celerio es sorprendentemente espacioso en la parte delantera. Hay mucho espacio para la cabeza y los asientos se deslizan hacia atrás lo suficiente para acomodar a los que tienen las piernas largas.

Hay unos cuantos cubículos pequeños salpicados - en los apoyabrazos de la puerta, delante de la palanca de cambios y entre los asientos delanteros - y la guantera no es muy ruidosa. También hay un par de portavasos delante de la palanca de cambios. Sin embargo, los contenedores de la puerta principal son bastante estrechos, así que no esperes que quepan en ellos.

Con tres cinturones de seguridad traseros, el Celerio es técnicamente un vehículo de cinco plazas. Sin embargo, a menos que los tres de la espalda sean extremadamente delgados, simplemente no caben. Es mucho mejor pensar en el Celerio como un cuatro plazas, en cuyo momento es bastante espacioso para los estándares de los coches de ciudad.

Hay más espacio en la parte trasera de la cabeza de lo que encontrarás en muchos rivales y una cantidad sorprendentemente generosa de espacio para las rodillas.

Los bolsillos de la puerta no son grandes, pero están esculpidos de tal manera que pueden sujetar con seguridad una lata de refresco o una pequeña botella de agua, dejando suficiente espacio para unas cuantas cosas.

Flexibilidad de asientos en el portón trasero de Suzuki Celerio

Todos los Celerios vienen con asientos traseros plegables con separación 60/40. Son fáciles de usar: basta con tirar de un cordón, empujar el respaldo hacia delante y éste cae sobre la base del asiento. Como con la mayoría de los coches de ciudad, sin embargo, los asientos traseros no hacen nada inteligente como deslizarse o reclinarse. Tampoco existe la opción de un asiento de acompañante de altura regulable ni de un apoyo lumbar regulable.

Diseño Exterior

En cuestiones de diseño, Suzuki no ha apostado demasiado con este coche, que conserva una imagen demasiado insustancial como para llegar a quedarse obsoleta. De acuerdo con la tónica dominante en los utilitarios japoneses de gama más baja, la carrocería solo incluye los detalles que resultan totalmente imprescindibles.

Nada de alardes estéticos ni de elementos que puedan encarecer ligeramente el precio de este coche. Su frontal es una combinación básica de faros, parrilla y entrada de aire, en la que ninguno de los elementos toma especial protagonismo.

Los faros tienen un diseño bonito, aunque propio de modelos de la década pasada, y se fusionan con cierta estética con la parrilla horizontal. En el lateral del Celerio apenas hay elementos que llamen la atención. La carrocería adquiere formas sencillas y alargadas que más tarde se traducirán en un amplio espacio interior. Las puertas son grandes y de formas rectas, algo que siempre facilitará el acceso al interior.

Finalmente, la zaga de este coche mantiene esa filosofía minimalista y funcional. El portón y los pilotos están colocados con habilidad, e incluso se podría decir que tienen cierto atractivo en sus formas.

Mención aparte: Transmisión “Two Ways System”

La novedad tecnológica del vehículo está dada por la incorporación de la transmisión “Two Ways System”, que es en teoría una caja manual de operación automatizada.

Su operación inicialmente se torna algo confusa por su presentación, similar a la de una transmisión automática pero sin la posición Parking (P) con la que normalmente inician su marcha ese tipo de vehículos. En este caso, hay que encenderlo en Neutro para luego sí proceder a ponerlo en Drive (D).

Cuenta con dos modos de manejo: “Drive” que funciona como una transmisión automática de 5 velocidades y embrague sencillo, haciendo que el intervalo entre los cambios sea mucho más largo llegando a perder un poco de potencia por la caída de revoluciones; o modo Manual, en el que los cambios se realizan como si se tratara de una transmisión secuencial.

En este modo hay que tener en cuenta que al no ser una caja automática sino automatizada, al llegar al límite de revoluciones en los cambios se produce el corte en la inyección, hasta que se suba la marcha manualmente.

Seguridad

El gran talón de Aquiles de los citycar ha sido, por fortuna, una de las apuestas de Suzuki para el Celerio: un vehículo que equipa frenos con sistema ABS y EBD en sus cuatro ruedas y airbag para conductor y pasajero son lastimosamente una novedad, pero son una de las cartas fuertes con que el Celerio entra a competir en su segmento y son algo a lo que como consumidor hay que apuntarle.

Sin embargo, el Celerio no cuenta con el sistema ISOFIX para asientos infantiles, algo que es casi obligatorio en vehículos dirigidos a las nuevas familias. Por otro lado, además harían falta sensores de parqueo, cámara de reversa y para completar este apartado.

El sistema de bloqueo en las puertas controlado desde la llave abre la puerta del conductor con un solo toque y la de las demás puertas con un segundo toque. Sin embargo, las puertas no se aseguran de forma automática al iniciar marcha.

Lo complementan los cinturones de seguridad de tres puntos para cuatro ocupantes y de dos puntos para el puesto central de la segunda fila de asientos, sistema inmovilizador para el sistema de inyección en caso de colisión, faros antiniebla, tercer stop, carrocería con alta resistencia a la torsión, barra de protección lateral y el seguro para niños en las puertas traseras.

Puntos a Favor 

– Buena iluminación exterior
– Altura considerable con respecto al suelo
– Comodidad en el interior tanto para conductor y pasajeros
– Amplios espejos retrovisores exteriores
– Economía en consumo de combustible
– Buen torque aun teniendo un motor de pequeño cilindraje
– Buena respuesta en el acelerador
– Estabilidad y agarre en las curvas
– Visibilidad en las cuatro puntas del carro
– Frenado preciso y puntual
– Suspensión suave y muy bien ajustada
– Equipamiento de Seguridad Pasiva
– Insonorización del motor
– Disminución de la vibración en la cabina
– Sistemas de seguridad acoplados a la transmisión

Puntos por Mejorar

– La operación de la transmisión requiere conocimiento y adaptación especial
– Sensación de ruido exterior en la cabina
– Acabados y plásticos de baja calidad en manufactura
– Sillas delanteras con poco agarre
– Falta de apoyacabezas independientes en asientos traseros
– No posee espejo retrovisor día/noche
– Botones del manejo del computador a bordo con un alcance dificultoso
– Lapsos entre marcha y marcha demasiado largos

Evaluación final

El Suzuki Celerio es sin duda, uno de los citycar mejor equipados con que cuenta el mercado colombiano en estos momentos, además de montar un motor muy económico y una transmisión novedosa que ofrecen una conducción placentera.

Ideal para la ciudad y con una solvencia superior en carretera es un vehículo que desde el diseño exterior e interior y el uso de materiales que ofrecen una muy buena insonorización lo sitúan en un vehículo dirigido a un público joven o para nuevas familias.

El Suzuki Celerio continúa la saga de aciertos de la casa nipona con vehículos cómodos, eficientes y en función de una buena experiencia al volante y que a pesar de su costo, es comprensible en cuestión de la tecnología que equipa y la seguridad, un apartado al que como usuarios y clientes no se puede ser ajeno o seguirle dando un estatus de exclusividad.

El fabricante japonés quiso tomar la batuta en este asunto, sobresalir ante sus rivales y mostrarle a la clientela que sí es posible tener un auto de estas características con el equipo necesario para ofrecer protección a sus ocupantes.

Frente al sistema de transmisión “Two Ways System”, podemos decir que puede ser del agrado del público por cuanto permite que el conductor se despreocupe un poco del manejo de la caja y disfrute de una mejor experiencia al volante.

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